QUIJOTADA OLIVA PRESENTÓ DRÁCULA EN UNA NOCHE CARGADA DE EMOCIÓN

La presentación era la primera para la filial de QUIJOTADA en esa localidad. El Auditorio Municipal estaba colmado a más no poder. Todos (y todo) fue transportado a otro tiempo, en otro lugar.

Y Oliva dejó de ser Oliva, y las tinieblas inundaron la ciudad. Oscuros truenos resonaron y refusilos alumbraron vagamente el camino. Oliva dejó de ser Oliva y se transformó en Transilvania, donde el Conde Drácula es amo y señor. Londres apareció en su horizonte, y así nos llevaron los QUIJOTES con su magia. Oliva dejó de ser Oliva, en ese ambiente paralelo que sólo QUIJOTADA sabe crear. Y creó, sin más, ese ambiente emotivo, poco ceremonial de las lágrimas, y despertó la no común y perpleja mirada sobre la calidad y el talento, y creó, una vez más, la mirada valorizante que QUIJOTADA esparce y proyecta como una luz que guía a un mundo mejor.

La obra fue ensayada por meses, con el Maestro QUIJOTE Marcos Frassetto haciéndose cargo de los mismos, para presentarse este pasado sábado 22, con la dirección general del equipo técnico de QUIJOTADA, especialmente de Tamara Pereyra y Jonathan Gonzales. El papel de Drácula fue asumido por Alexis Falconi, el de Mina por Leila Pereyra, mientras que el de Jhonatan estuvo interpretado por Lorenzo Tamis, el de Lucy por Belén Ciccarelli, el de Nani por Gisel Ferreyra y el de Van Helsing por Lucas DeMaría. Jacinto Pussetto y Marcos Ribone se hicieron cargo de la iluminación, mientras que Marta Legrand fue quien presentó a los artistas.

Tras esta presentación, Oliva volvió a ser Oliva, pero algo había cambiado para siempre: QUIJOTADA había dado su primer paso, gigante, emotivo, talentoso, valorizante, de muchos pasos a dar en esa localidad…

Fotos: Monssettone Producciones