viernes, 27 de febrero de 2009

SE VIENE LA SEGUNDA EDICIÓN DE "QUIJOTADA, LA REVISTA"





Entrevistas a notables de la cultura argentina, un informe especial sobre violencia familiar, educación, salud, cuentos, poemas y todo el compromiso y el vuelo de los QUIJOTES, pronto estarán en la calle, con la segunda edición de “QUIJOTADA, La Revista.”

martes, 17 de febrero de 2009

CENTRO CULTURAL EXPRESARTE

El Centro Cultural expresARTE es un proyecto de inclusión social, que tiene lugar en Clorinda, Formosa, y que fue iniciado por Patricio Young.
Este grupo trabaja con niños y adolescentes a través de distintos vínculos, sobre todo el teatro, creando un verdadero espacio que se erige sobre una noble actitud ética y con absoluta creatividad, sin usurpar ni despojar nada a nadie, moviéndose con un genuino afán inclusivo, a través de una acción real y concreta y sin “discurseos” de ninguna índole.
Es nuestro deseo, como amigos admirados de este proyecto, quererlo compartir con los seguidores de QUIJOTADA.

Para más información, pueden entrar a su blog: www.proyecto-expresarte.blogspot.com

Aquí compartimos algunas fotos.









viernes, 6 de febrero de 2009

"LOS RICOS NO QUIEREN QUE LOS POBRES SEPAN NI APRENDAN NADA"

Susana Fiorito junto a Hilia Corzo, durante una de sus visitas a QUIJOTADA.

Entrevista a Susana Fiorito

Cuando uno conoce a Susana Fiorito, siente que con algunas personas más como ella, el mundo sería otro mucho mejor. Luchadora incansable a favor de los derechos de los que menos tienen, es el alma de la Fundación Pedro Milesi y de la Biblioteca Popular de Bella Vista, un barrio obrero de la Ciudad de Córdoba. Estas obras, levantadas en 1990, hoy albergan a cientos de vecinos que se acercan en busca de un conocimiento que les fue vedado por las injustas desigualdades que nos maltratan a diario. El costo para participar de los más de treinta talleres que allí se dictan, es cero.
Susana estuvo entre nosotros, participando de la primera charla-conferencia sobre Educación, Salud y Arte organizada por QUIJOTADA. En medio de las charlas (dio una en Villa María y otra en Villa Nueva, junto a Laura Ferreira, por AVE, e Hilia Corzo, por QUIJOTADA), se hizo un tiempo para charlar con los QUIJOTES y responder a sus preguntas.
-¿Cómo es que llega a Bella Vista?
-Con un grupo de gente, en la que estaban Andrés Rivera, que es mi compañero, Carlos Massera, Roberto Vélez y José Ponce, pensábamos en fundar la biblioteca y buscábamos un barrio obrero. Bella Vista era un barrio obrero, y además era un lugar barato, que es lo que necesitábamos, porque nos habíamos pasado muchos años juntando plata, pero no teníamos mucha.
-¿Por qué se ocupa de la educación no formal?
-Porque la educación formal es una obligación del Estado, ya sea la nación, la provincia o la municipalidad. Nosotros somos miembros de la sociedad civil, que no estamos en el aparato del Estado, entonces podemos elegir la estrategia de educación que querramos y nos parece que le educación no formal (sobre todo, dentro de lo no formal, lo popular) es la forma de aprender nosotros, por empezar, y de enseñar que es más fructífera, más humana, y que se acerca más a la necesidad de todos.
-¿Qué piensa de la violencia que hay hoy en las escuelas?¿Cuál cree que puede ser el causante?
-La violencia que hay en las escuelas es el resultado del funcionamiento económico y social que tiene este país y todo el llamado mundo occidental. Cuando vos tenés un sistema que tiene muy poquititos propietarios, que tienen todo y que son muy ricos y hay mucha gente muy pobre, siempre va haber violencia. Primero, porque los ricos no quieren que los pobres sepan ni aprendan nada. Este sistema, para subsistir, necesita que haya una cantidad de desocupados y los desocupados son pobres, porque en esta sociedad no sos rico por lo que sos, ni por lo que hacés, sino por lo que ganás cuando vendés tu fuerza de trabajo. Entonces, la violencia cómo no va a surgir, si hay gente que está despojada de todo y hay gente que tiene tres autos. Es un sistema que no es equitativo, entonces hay violencia.
-¿Qué modalidad de trabajo tienen en la Biblioteca?
Nosotros trabajamos con talleres, que se hacen de acuerdo a lo que pidan los vecinos o lo que nosotros vemos que les pueda interesar. Por ejemplo, los vecinos vinieron un día y nos pidieron “queremos yoga, porque me duele mucho el cuello, porque no puedo caminar bien”, por lo que sea, entonces hicimos un taller de yoga. Otra vez vemos a los chicos que agarran una piedra y rascan el asfalto, entonces pensamos que si estos chicos en vez de tener una piedra tuvieran un lápiz y un papel o un pincel, a lo mejor hacen un dibujo lindo, entonces nosotros proponemos un taller de pintura. Y así se da una mezcla de lo que la gente pide y lo que la gente necesita, pero no sabe que lo necesita.
-¿Por qué poner una biblioteca y no, por ejemplo, un comedor?
-Porque creemos que el asistencialismo no ayuda a nadie. Lo que hacemos es enseñar gratis y aprender gratis. El asistencialismo es una forma de dominación. Que la gente se acostumbre a ir a un comedor o a un lugar a buscar ropa o algo y no sea él, con su trabajo, el que se lo gane, es una manera de tenerla sujeta ahí y de rebajarle la dignidad, porque no es lo mismo ganarte la vida, tener un trabajo posible, que ir el 28 de cada mes al Centro de Jubilados a buscar un bolsón que te regalan porque sos pobre. Ser pobre no es una condición del sistema, sino que es una lacra.
-¿Cómo hace para que los chicos lleguen a la biblioteca?
-No tuvimos que hacer nada, saltaban por la ventana. Cuando compramos, que era un depósito de forrajes y no teníamos rejas, le abríamos las ventanas y los chicos se metían para ver qué era eso. Y eso era una mesa grande, que era de mi bisabuela, esas grandes con las patas torneadas, cuatro o cinco tablones sobre unos ladrillos y ahí había cuatrocientos libros y unas sillas y nada más. Los chicos saltaban por arriba de las mesas, se revolcaban, hojeaban los libros, los tiraban... entonces una señora del barrio dijo “los chicos no se hacen bien a ellos ni le hacen bien a la biblioteca, vamos a intentar que dibujen”. Se compró una caja de lápices de colores, se fue al barrio, pidió prestado ese papel que salía antes de las computadoras, largo como un acordeón, usados, o sea impresos de un lado, y los puso a dibujar. Entonces hablaban, contaban un cuento y ellos dibujaban algún personaje del cuento. Pero resulta que un chico le da un codazo a uno de al lado y este le dio un codazo al otro y así se les movía el dibujo. Entonces a esta señora se le ocurrió comprar un rollo de papel de almacenero, abrió el rollo, lo hizo correr sobre la mesa y los clavo con chinches, entonces si yo te movía a vos, se me movía a mí, porque el papel era uno. Eso los curó bastante de golpearse. Así empezó la biblioteca, contando cuentos y haciendo dibujos.
-¿Cuántos libros tienen ahora?¿Cómo los consiguen?
-Empezamos con cuatrocientos y ahora tenemos veintiún mil. Los compramos, recibimos donaciones, algunas muy buenas, otras... cuando se muere una persona, los hijos suelen no querer los libros de los padres, entonces te hacen una donación. Vamos, nos alquilamos un taxi o lo que sea y los traemos a la biblioteca y la mayoría de las veces son libros llenos de hongos o que no valen nada. Pero nosotros aceptamos siempre donaciones, porque creemos que la persona que lo está mandando, si bien se lo está queriendo sacar de encima, no se anima a tirarlos, y es bueno eso. Por eso siempre los aceptamos. Regalamos muchos libros también, libros que son buenos los regalamos a bibliotecas chiquititas que recién empiezan.
-¿Qué la mueve a trabajar con niños marginados y no, por ejemplo, con ancianos?
-En realidad optaron ellos. Nosotros abrimos la biblioteca para todo el mundo, pero ellos se metieron adentro. Pero también trabajamos con ancianos. En los talleres de expresión corporal, en el taller de canto, en el de escritura. Se trabaja con todas las edades. Tenemos una actriz de 86 años y en los talleres de alfabetización tenemos gente muy adulta que no tuvo la oportunidad a aprender a leer y a escribir.
-¿Los talleres de alfabetización cada cuanto los dictan?
-Todos los años y con muy poca convocatoria. Cuatro o cinco personas. La gente no quiere decir que no sabe leer. Nosotros vamos y les preguntamos si se acuerda del primario, si se olvidó de laguna cosa, nunca le decimos a una persona “¿usted es analfabeto?”. También le enseñamos a escribir a chicas que están bajo juez, porque tienen algún problema mental o alguna discapacidad física y están internadas y muchas de ellas no saben ni leer ni escribir, o sea han olvidado, o por el mismo problema mental que tienen no pueden coordinar bien.
-¿Qué necesidades ve en los chicos?
-Esos chicos que están marginalizados, echados de todo lo que es humano, necesitan cariño, por empezar, necesitan que se les hable y que se les diga. Necesitan leer, enterarse de otro mundo. Necesitan que en la escuela los traten bien y que en la escuela puedan aprender, no que sea una escuela para que no aprendan. La escuela últimamente se a transformado en un lugar para que los chicos no aprendan nada y para que tengan frustraciones, cosas que no pueden hacer y por lo tanto se carguen de violencia. Volviendo a la pregunta sobre la violencia: una gran parte de la violencia sale por que la gente no tiene trabajo, por que no tiene una diversión buena, tienen que estar mirando la televisión con todas esas cosas que se mueven rápido y golpean, porque le violencia se aprende también.
-¿Cómo se contacta con QUIJOTADA?
-Hace bastantes años, en una reunión de una institución que se llama AVINA, en donde QUIJOTADA fue a contar su proyecto y nos gustó mucho su trabajo. Nos interesó mucho y nos escribimos mails para ver si podían ir a la Biblioteca. Porque otra cosa que hace la Biblioteca en el barrio es que los vecinos se puedan asomar a cosas lindas que se hacen en otras partes y que no circulan en el circuito comercial. Y pudimos tenerlos dos veces. Los vecinos quedaron... ¡nunca habían oído música así! Nunca habían visto actuar a chicos así. Sí a sus chicos, sus sobrinitos, pero no todo un grupo tan bien organizado. Los talleres de teatro dentro del barrio son muy modestos. Hay toda una cosa que tiene QUIJOTADA que es muy bella para la gente que no está acostumbrada. Es como un cuento de hadas.
-¿Cuándo podría darse de unir el grupo de chicos con los que usted trabaja con nosotros?

-Eso lo tenemos que trabajar mucho con ustedes, para volver a realizar un encuentro. En realidad trabajar no, estamos viendo quién nos da la plata, porque el tema es la plata, y para trasladar a QUIJOTADA hace falta mucha. Nosotros por ejemplo no tenemos un sonido que le podamos dar a QUIJOTADA. Tenemos una consola modesta y QUIJOTADA necesita un buen sonido.


Nota originalmente publicada en "QUIJOTADA, La Revista", primera edición.